Nuestra misión
En Holy Made, partimos de una creencia sencilla pero poderosa: cada persona es creada a imagen de Dios y lleva su impronta divina. No somos fruto del azar ni añadidos de última hora; somos formados, elegidos y apartados con un propósito. Esta verdad define quiénes somos e impulsa todo lo que hacemos.
Nuestra misión es cultivar una comunidad basada en la fe donde las personas se sientan animadas a abrazar su identidad en Cristo con valentía y confianza. Creemos que cuando los creyentes saben quiénes son en Él, pueden vivir con coraje, caminar en libertad y compartir su fe con una voz genuina y que da vida. La autenticidad es fundamental, y queremos crear espacios donde las personas se sientan libres de ser ellas mismas, sabiendo que Dios nos encuentra donde estamos y nos transforma desde dentro.
Holy Made es más que un nombre; es un llamado a vivir lo que significa estar consagrados a la gloria de Dios. Vemos esta misión desarrollarse de tres maneras: conexión, ánimo y testimonio. A través de la conexión, nos unimos como hermanos y hermanas en Cristo, permaneciendo unidos en un mundo que a menudo intenta dividirnos. A través del ánimo, nos fortalecemos mutuamente, recordándonos que las promesas de Dios son verdaderas y su presencia es constante. Y a través del testimonio, compartimos historias de la bondad de Dios, declarando al mundo que su poder está vivo y obrando hoy.
Creemos que vivir como personas santas significa integrar la fe en cada aspecto de nuestra vida. No es algo que activamos los domingos por la mañana y luego olvidamos durante la semana. Es, en cambio, la forma en que amamos, servimos, perdonamos y reflejamos nuestra luz en los momentos cotidianos. Ser santo es identidad y acción; es quienes somos y cómo vivimos.
Nuestra misión es reflejar a Jesucristo en todo. Buscamos recordar al mundo que la fe no es distante ni abstracta, sino real, personal y destinada a ser compartida. En Holy Made, caminamos juntos en unidad, arraigados en la verdad, impulsados por la gracia y guiados por el Espíritu. Oramos para que cada persona que se conecta con nosotros descubra el valor que Dios le ha dado y entre con valentía en la vida con propósito que Él le ha preparado.